Los tallos y las hojas poseen un fino vello que no
oculta su esplendido verdor. El tallo es rollizo y las hojas son
estrechas y largamente lanceoladas. Se cria en los bordes de
caminos, laderas de montes y lugares pedregosos.
Las flores se recogen en unos largos racimos, cada uno con su
cabillo propio y cada ramillete contiene dos o tres hojas en la
base. Los frutos se recogen de cuatro en cuatro y son de figura
semiovoide. La hierba florece de mayo en adelante, madurando los
frutos a partir del mes de julio.
Con fines medicinales interesa la raiz, aunque de toda la planta se
puede sacar provecho. Las partes herbaceas de la cinoglosa contienen
alrededor de un 7% de materias tanicas, que en la raiz se elevan a
mas del 10%. Encontramos tambien una esencia con un olor parecido al
que despide la
manzanilla.
La raiz contiene ademas resinas, gomas, materias grasas y, segun
algunos autores, existe una sustancia hemolitica que posiblemente
sea de naturaleza saponinica. En las semillas se encuentra un
alcaloide llamado cinoglosina y un glucoalcaloide, la consolidina.
La principal virtud de esta hierba es la de ser astringente.
Asimismo se le ha querido atribuir una accion paralizante sobre los
nervios motores, semejante a la accion del curare, pero esto aun
esta un poco en entredicho. En algunos paises las hojas gozan de
cierta popularidad contra las inflamaciones de las vias
respiratorias y digestivas, empleandose para combatir catarros
bronquiales, calmar la tos, rebajar la inflamacion de hemorroides,
etc. Las propiedades astringentes de la hierba permiten emplearla
eficazmente contra la diarrea. Tambien en algun escrito se menciona
su uso para sanar llagas. En cualquier caso, debe usarse con
prudencia a causa de los efectos narcoticos que pueden producirse a
dosis elevadas. En medicina homeopatica esta indicada contra el
insomnio.
Decoccion: Se hierve durante cinco minutos 5 g. de raiz en 1/2
l. de agua; se cuela el liquido y se deja templar. Se aplica en
forma de compresas externas sobre las grietas de la boca y pezones,
con excelentes resultados.
Hojas frescas: Las hojas frescas
machacadas, con su jugo, se aplican sobre ulceras o heridas en una
compresa de algodon o gasa. El vendaje se debe renovar dos veces al
dia. |